miércoles, 10 de marzo de 2010

Haciéndome mayor...

Hoy sin quererlo he tenido que dar un importante paso en la vida, se ha acabado un ciclo precioso.

Cuando he llegado a casa, mi querida madre se ha cargado la mitad de mi infancia de un tirón, ha subido la PlayStation2 al trastero.

Así, como suena, me ha quitado mi Play sin preguntar, entendiendo que "ya soy demasiado mayor para esas cosas", a lo que he pensado "porque tú lo digas!!!".

Es verdad que estaba llena de polvo y que hace muchísimo que no jugaba pero, mirar debajo del televisor y no ver mi querida y monstruosa PlayStation (porque la mía es de las buenas, de las gordas, no esa mariconada de PS2 fina)... no lo sé, no lo concibo.



Con la de horas que hemos pasado juntos, la de alegrías y disgustos que me ha dado y esas partidas al Pro, al GTA o al WWF... y todo para acabar en el trastero entre sillas de playa y libros de la EGB.

Mi madre no tiene corazón.